Un especialista desvela el trucazo para que tus geranios sigan floreciendo sin parar

Los geranios son plantas versátiles y fáciles de cuidar, ideales tanto para jardines como para balcones o terrazas. Originarias de Sudáfrica, estas plantas son apreciadas por sus colores brillantes y su capacidad para florecer abundantemente. Sin embargo, para disfrutar de flores hermosas y saludables, es importante saber cómo cuidarlas correctamente y cuándo sacarlas afuera para que aprovechen la luz solar.

Cómo estimular la floración de los geranios

Luz solar: Los geranios aman el sol y necesitan al menos 6-8 horas de luz solar directa al día para florecer abundantemente. Colócalos en un lugar donde puedan recibir suficiente luz, como un balcón o una terraza soleada.

Riego adecuado: Es esencial mantener el suelo húmedo, pero no excesivamente mojado. Los geranios prefieren tomar la humedad del suelo, no de las hojas. El riego excesivo puede llevar a la pudrición de las raíces, así que asegúrate de que las macetas tengan un buen drenaje.

Eliminación de flores marchitas: Un truco esencial para estimular la floración continua es eliminar inmediatamente las flores marchitas o secas. Esto ayuda a la planta a producir nuevas flores y a mantener un aspecto saludable.

Fertilización: Utiliza un fertilizante equilibrado, rico en fósforo, para estimular la floración. Aplica el fertilizante una vez cada dos semanas durante la temporada de crecimiento para asegurar una nutrición adecuada.

Poda formativa: La poda regular de los geranios ayuda a mantener una forma compacta y estimula la producción de nuevos brotes y flores. Elimina las ramas secas o enfermas para permitir que la planta se concentre en un crecimiento saludable.

A qué temperatura sacar los geranios afuera

Los geranios son sensibles a las temperaturas bajas y no deben sacarse afuera hasta que las temperaturas nocturnas superen constantemente los 10°C. La exposición repentina a temperaturas bajas puede afectar negativamente a las plantas, por lo que es importante aclimatarlas gradualmente a las condiciones exteriores.

• Temperatura ideal: Los geranios se desarrollan mejor a temperaturas entre 18°C y 24°C. Antes de sacarlos afuera, asegúrate de que las temperaturas nocturnas no bajen de 10°C.
• Aclimatación: Comienza sacando los geranios afuera por unas horas al día, aumentando gradualmente el tiempo que pasan al aire libre. Este proceso de aclimatación ayuda a las plantas a adaptarse a las nuevas condiciones y a evitar el choque térmico.
• Protección contra el frío: Si existe riesgo de heladas, lleva los geranios de vuelta al interior o cúbrelos con una lámina protectora para protegerlos de las temperaturas bajas.