En suspenso los pagos mensuales de mil euros a los socios de Galivivienda para acceder a sus pisos sociales

A Coruña

La cooperativa Galivivienda deberá entregar en las próximas semanas más documentación al Instituto Oficial de Crédito para intentar alcanzar un acuerdo sobre las condiciones del préstamo que permita construir las viviendas de alquiler socialcomprometidas, tras la adjudicación de la Xunta de Galicia, en el barrio de Xuxán. Tras una reunión en las últimas horas, el ICO y la cooperativa han acordado "seguir trabajando". Quedan en suspenso las exigencias que obligaban a los socios a entregar aportaciones de hasta mil euros mensual, entre alquiler y capital a pesar de que eran pisos sociales. Galivivienda ha eliminado el plan de pago en diez años.

Aportaciones pactadas y dudas sobre la solvencia

Se mantienen las aportaciones acordadas en un primer momento, con abono progresivo de 14 mil euros pactado con los cooperativistas. El director de Galivivienda, Rafael Román, señala que queda pendiente ajustar la manera de garantizar la solvencia en caso de que no se cumplan las previsiones de ocupación, origen de las exigencias que llevaron a las protestas de los cooperativistas.

A su juicio su empresa, Galivivienda, no tiene que aportar capital. Tiene que tener previsto un plan económico y unos recursos propios que, según sus declaraciones procederán de las aportaciones de los socios.

Solares de la Xunta, financiación europea y préstamo del ICO

Insiste en que el proyecto se asienta en cuatro solares propiedad de la Xunta y los edificios se construirán con las ayudas europeas y el préstamo del ICO. Pretende devolver el préstamo con los alquileres de las viviendas y locales. en un plazo por determinar situado entre 36 o 39 años.

Los afectados han recibido un comunicado de Galivivienda en que se reseña el "compromiso firme del ICO y Galivivienda en trabajar conjuntamente para sacar adelante el proyecto" y explica que en los próximos días aportará nueva documentación. Señalan que llevan dos años de espera sin suficiente información y piden a la Xunta que aclare la situación del proyecto y se haga responsable de la situación. Todavía falta la licencia de una de las parcelas y solamente una parte del proyecto cuenta con suelo porque ha subrogado una cooperativa en otra.

Explican que en iniciativas similares desarrolladas en Europa u otras comunidades autónomas los proyectos cuentan, para arrancar, con el aval de los gobiernos autonómicos o bien por acuerdos con algún banco, aunque luego llegue el dinero público.

Insisten en que no cuentan con información sobre las cuentas de la empresa y ni siquiera han tenido acceso al listado de socios de la cooperativa. Aseguran, además, que Galivivienda admite cooperativistas que no van a ser inquilinos, algo que no es habitual en este modelo.

La alcaldesa volvía a reiterar que la aplicación del modelo de la Xunta ha resultado falleido y pide a la administración autonómica que asuma sus responsabilidades.