El joven al que la Policía dejó inconsciente en Lavapiés tras una detención presenta una denuncia: "Lo que les da miedo es lo que pase cuando se encuentren de nuevo al agente"

Madrid

"Físicamente poco a poco se va recuperando porque, por suerte, no tiene lesiones graves. Ahora bien, a nivel psicológico, el chico sigue asustado, no entiende nada y está muy preocupado por toda la situación", es lo que explica Carmen Ordóñez, abogada de la Fundación Raíces que lleva el caso del joven -al que no ponemos nombre para respetar su privacidad.

Dos semanas después de que se produjera la detención, en el barrio de Lavapiés, por parte de agentes en servicio durante una ronda de identificaciones, el chico -junto a la Fundación- ha presentado una denuncia y todavía está a la espera de que el juez inicie formalmente el procedimiento judicial para la investigación. "Lo que hemos hecho es presentar unos hechos y decir que esos hechos pudiesen constituir una serie de delitos que, en este caso, consideramos que son delitos de tortura, delito de lesiones, incluso, delito de odio", aclara Ordóñez. Sostiene la abogada que, a pesar de que en los vídeos difundidos por redes sociales, se ve perfectamente a dos agentes que reducen al joven de forma violenta, ellos no acusan directamente a dos personas, pero sí han pedido en la solicitud que declaren como investigados.

"Trabajamos con chicos que han sufrido abuso policial"

Para la Fundación Raíces este tipo de incidentes no son aislados, sino que se han encontrado muchos casos de personas, especialmente de origen magrebí o afrodescendiente, que han reportado abusos policiales. "No existen tantas denuncias, ni tantas condenas, pero la realidad es que ocurre. Nosotros trabajamos con muchos chicos que nos trasladan que han sufrido abuso policial: identificaciones indiscriminadas, faltas de respeto o agresiones". Y sigue: "Muchos de ellos seguramente quieren denunciar, lo que les da miedo es lo que pueda pasar cuando se encuentren de nuevo al policía, y eso creo que es un problema de del cuerpo y un problema de concienciación. No quiero generalizar, pero la realidad es que podemos ver que, efectivamente, hay mucho estigma y mucho racismo".

La Fundación también ofrece apoyo legal y social a las víctimas, ayudándolas a presentar quejas ante el defensor del pueblo o a buscar asistencia jurídica si deciden seguir adelante con un proceso judicial.